Como ya había acabado la liga infantil, me apetecía jugar alguna partida lenta en la liga de mayores. Iba a jugar en segunda con mi equipo, pero en primera necesitaban un par de jugadores y me llamaron para jugar en quinta mesa.
Nos tocó madrugar para ir a San Lorenzo del Escorial y enfrentarnos al Amigos del Ajedrez. A mi me tocó jugar con negras contra Francisco Pérez Mansilla (1815) y fue la partida más larga porque duró cuatro horas y media. En el resto de mesas ganaron dos mesas, perdimos en última mesa y dos partidas acabaron en tablas. Yo ofrecí tablas porque estábamos igualados y nos bastaba para ganar la ronda, pero mi rival no podía aceptar y se la jugó.
Fue una partida muy complicada donde yo no vi una táctica donde perdía pieza hasta justo después de mover. Menos mal que mi rival tampoco se dio cuenta. Después llegamos a un final de alfil suyo contra caballo mío y varios peones por bando, en una posición equilibrada. Con apuros de tiempo cometió un error moviendo su rey a d5, que supe aprovechar. El final de la partida está más abajo:
Nos tocó madrugar para ir a San Lorenzo del Escorial y enfrentarnos al Amigos del Ajedrez. A mi me tocó jugar con negras contra Francisco Pérez Mansilla (1815) y fue la partida más larga porque duró cuatro horas y media. En el resto de mesas ganaron dos mesas, perdimos en última mesa y dos partidas acabaron en tablas. Yo ofrecí tablas porque estábamos igualados y nos bastaba para ganar la ronda, pero mi rival no podía aceptar y se la jugó.
Fue una partida muy complicada donde yo no vi una táctica donde perdía pieza hasta justo después de mover. Menos mal que mi rival tampoco se dio cuenta. Después llegamos a un final de alfil suyo contra caballo mío y varios peones por bando, en una posición equilibrada. Con apuros de tiempo cometió un error moviendo su rey a d5, que supe aprovechar. El final de la partida está más abajo: